necesito curarme de ti
para curarme de mí
círculo vicioso
llegaste, te ví, te quise, nada, me fui
volviste, te aprendí, no fue, partí
regresas, te sentí, escapaste, caí
vuelta a empezar
necesito curarme de ti
para curarme de mí
alienante cuadratura
exhausta de tanto vaivén inusitado
permanezco en el fondo del mar
aparece una barca, vela arriada, salvadora,
no hay fondo
se hunde, me hunde, me hunde
tú a flote
yo allá sin más en el fondo
atada al espacio de cotidianeidad
ajustada al mundo de seguridad
frenada en el pedestal de la calma
necesito curarme de ti
para curarme de mí
soporífero estado
no hay rutina
no hay certeza
no hay serenidad
remolinos que soplan vientos
torbellinos que sostienen olas
parar, parar
floto en el fondo del mar
y el silencio prima
aire
sólo aire
necesito respirar